El 1 de Enero de 2015 ha sido la fecha fijada por la Unión Europea para llevar a cabo el siguiente salto cualitativo en cuanto a eficiencia energética se refiere.

La Directiva Ecodesing 2009/125/EC, conocida también como “Directiva ErP” por su orientación a productos energéticos (Energy-related Products), pretende con ello dar un paso más hacia el objetivo establecido “20-20-20”, que consiste en reducir el consumo de energía un 20%, mientras se incrementa el uso de energías renovables un 20%, con una fecha límite establecida para el año 2020.

La normativa ha sido subdividida en 27 lotes, cada uno de ellos con fechas límite diferentes, que incluyen la mayoría de productos sujetos a consumo energético. El Lote 11 es en este caso el afectado y tiene como ámbito de aplicación Ventiladores (NRVU) que cumplen con las siguientes características:

• Estén equipados o diseñados para su uso con un motor eléctrico de potencia eléctrica de entrada entre 125-500 kW.
• Sean ventiladores axiales, centrífugos, tangencial, mixto.
• Estén o no equipados con un motor en el momento de su comercialización o puesta en servicio.

¿Qué cambia a partir de ahora?

La eficiencia energética de todos los ventiladores no residenciales deberá ser mucho mayor. A partir de enero de 2015 se establece en un umbral mínimo IE3 en vez del IE2 actual. Esto significa que el con niveles energéticos idénticos, el equipo ha de funcionar con una mayor eficiencia. En este caso concreto pasaremos de una alta eficiencia a eficiencia premium.

En la siguiente gráfica podemos ver la comparativa entre los diferentes niveles de IE (International Efficiency).

Por otro lado, el reglamento también se cumple empleando los motores denominados EC, o de imanes permanentes, con los que se obtienen muy altas eficiencias (superiores a las del IE3) con tamaños más reducidos y velocidades y pares constantes, independientemente de la carga. Disponen de electrónica y pueden acoplar variador electrónico de velocidad.

Exenciones

El Reglamento Nº (UE) 327/2011 NO se aplicará a los ventiladores:

1. Accionados (indirectamente) por un motor eléctrico de potencia inferior o igual a 3kW que se destinen principalmente a otras funciones.
2. Para campanas extractoras de cocina con una potencia eléctrica máxima total de entrada inferior a 280W.
3. Concebidos específicamente para funcionar:En atmósferas potencialmente explosivas, tal como se definen en la Directiva 94/9/CE.Con temperatura de funcionamiento del gas desplazado superior a 100 °C.En caso de emergencia, para funcionamiento de corta duración, teniendo en cuenta los requisitos de protección contra incendios establecidos en la Directiva 89/106/CE.
4. Cuando la temperatura ambiente de funcionamiento del motor que acciona el ventilador, fuera del flujo, exceda de 65°C.
5. Cuando la temperatura media anual del gas desplazado o la temperatura ambiente de funcionamiento del motor sea inferior a – 40 °C.
6. Con una tensión de alimentación > 1 000 V CA o > 1 500 V CC
7. Situados en ambientes tóxicos, altamente corrosivos o inflamables o en ambientes con substancias abrasivas

¿Cuáles son los siguientes pasos?

La Directiva ErP para ventiladores aún tiene otro paso que dar en enero de 2017 que resultará en ulteriores mejoras. En la siguiente tabla se especifica con detalle los cambios relativos a cada fase para mayor aclaración.

¿En que se traduce esta normativa para el comprador?

Desde el punto de vista del consumidor las ventajas son evidentes, puesto que más allá del aspecto medioambiental, esta nueva serie de ventiladores aporta ahorros energéticos suficientes para que la compra del ventilador pueda verse amortizada al poco tiempo y con un uso moderado.

Recordemos que el coste del ventilador representa solo un 2,5% del coste de funcionamiento durante su vida útil, por lo que es muy probable que después de pocos meses de su compra, el coste energético ya supere a su PVP.

En circunstancias de uso normal, la amortización de estos equipos es muy breve y aportará ahorros considerables en el futuro próximo.

Otra opción muy a tener en cuenta serán los variadores de velocidad, que con una buena instalación podrán regular el esfuerzo según la operación a la que se vean sometidos y así consumir solo lo necesario en cada circunstancia.